Un Poema

-Entonces la gente es extraña, entonces no sé lo que es esto, no sé lo que es

"¿Qué es exactamente un sentimiento?"

¿Cómo podría yo percibir un sentimiento? ¿Se transmiten los sentimientos por el aire? ¿Cómo se manifiestan los sentimientos? ¿Cómo se diferencia el amor del odio?

-Quizás debas replanteártelo todo, Joe...
 ¿Ocurre algo más?

-Quizás el sudor de mis manos sea real, quizás no sea provocado por nada imaginario, quizás no esté absorvido por un pensamiento irracional.

-Es lo que te digo tío, replantéatelo.

-Será mejor, aunque no creo que sirva de mucho. Creo que esto es así y ya está.

-Hola chicos, ¿ocurre algo?

-Hablábamos de percepción, fundamentalmente.

-Ni yo haberlo explicado mejor podría.

-Sabéis lo que pienso de todo esto no? 

-Ya...

-Es una gilipollez, podemos quedarnos en Birmania.

-No para siempre.

-Claro, algún día moriremos.

-Sabéis bien a lo que me refiero, no radicalicéis el pensamiento por el momento, porque somos muy buenos amigos.


-El caso es que no se si el sudor de mis manos y el momentáneo absentismo mental de cierto momento concreto es causado por algo real o por una paranoia sin sentido. Si es real me decepciono, e independientemente de ser paranoia o no para mí es real, porque paranoia es verdad para el paranoico, entonces sí que me decepciono; luego tengo dos posibilidades, decepcionarme con la gente o decepcionarme conmigo, y no sé que hacer.

-Está claro que debiera importarte una mierda, de todas formas, decepciónate con la gente, pues ya sabes cómo es y no hace falta que te explique nada que no haya explicado ya, puesto que vivo en el aire y formo parte de ti dado al gran aprecio que me tienes, Joe.

-Por mi parte te digo que seguramente sea todo ilusión irracional paranoica, y en caso de ser algo real, debieras replantearte el pensamiento acerca de la gente, debieras absorver y analizar, dejar fluír todo como un gran río caudaloso, liberar tu maindo y mentalizarte de otra manera.

-Me gustaría jugar al póker con vosotros en este garaje oscuro y misterioso, para que por un momento todo fluya como ese gran río que dice Joe, y para sentirme un poco apartado como sé que le gusta a Joe. Mientras jugamos iré con el punto dos, es que siento una especie de escalofrío cada vez que un sujeto toma la yema de uno de sus dedos y luego impacta contra uno de mis brazos, ya que es lógico.

-No has descubierto América con esto.

-Qué decir, qué decir... cuando tus palabras impactan contra mí como balas de viejo revólver en el póster de la caravana de un hombre que vende armas de contrabando.

 -Cierto tipo de gritos resultan molestos, cierto tipo de gritos generan violencia y esas cosas, liberando masculinidad de ti quizás evites comportamientos de los que probablemente te arrepientas.

-Estoy totalmente de acuerdo.

-Tienes razón en parte.

AL ATAQUEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE!